martes, 19 de febrero de 2013

Códigos

Si estás leyendo esto bien puede ser por intriga, por aburrimiento o por un simple pasatiempo. Pero en esta entrada le quiero escribir a alguien específicamente y que lo lea esa persona. Y si sos vos, la que lo estás leyendo, te darás cuenta que sos el destinatario mediante la telequinesis. Vos sos la misma! Sí! La misma a quién le escribí "4 primeras letras, sólo eso", "Incertidumbre" y otros títulos que ya conocés, pero no los escribiré acá debido a algo no difícil de entender: Estoy escribiendo en un cuaderno para después, (ahora) pasarlo, no tengo a mano las entradas que publiqué.
Nosotros trabajamos con códigos y vos lo sabés bien y sabés que si me esperás un tiempo más te lo agradeceré. Soy difícil, lo sé, pero te pido que me entiendas, cueste lo que cueste. 
Cambiando tal vez 20 grados de tema, me gustaría que sepas y yo sé que sabés que también me alimento con tus códigos, creyendo que son únicamente para mi, aunque tal vez sueño mucho y me precipito demasiado. Pero de una vez por todas me gustaría enterarme.
Bueno, ya habiendo hecho una no tan breve presentación y sabiendo que mi sueño me controla, apelaré al método pesimista para escribir, aunque dejando en claro que no me gusta esta postura. Pero creo que mi tiempo de alegría culminó y pienso destruirme interiormente si vas a estar ocultándote de mi. Sabés bien a qué me refiero y perdón si no pensás así, pero mi egoísmo quiere actuar, mi orgullo también, y aunque trato de frenarlos me dominan tanto que hasta en la escritura se resalta.
Pero miro el reciente pasado, a la forma en que te amé y aunque nunca seguro de lo que escribo, quiero que sepas, no pierdo la fe, pido un deseo y vuelvo a temblar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar no muerde...