domingo, 5 de mayo de 2013

Así ocurrió

Cada vez duraban más las clases, cada vez las horas se tornaban más aburridas y monótonas. Ya tenía que pensar alguna forma de sobrevivir. Ya sea el silencio, o el no ruido o el no murmullo, algo me molestaba en esas clases, me sentía deprimido y triste, tenía que hacer que algo cambie. Todos mis compañeros estaban en la misma situación (al principio pensar esto me reanimaba), pero tempranamente me di cuenta de que yo tenía que cambiar, no servía conformarme con lo que les pasaba a mis compañeros, más tarde noté que nadie hablaba del tema. Sólo en los recreos podíamos hablar entre nosotros o hablar con el profesor, pero no dialogaban o no dialogábamos sobre lo aburrido que era la clase (Lo que previamente yo había supuesto que pasaría pero no ocurrió, entonces entré a desesperar). Parecían adaptarse rápidamente, ¡tenían y tienen mi edad! ¡no pueden ser tan distintos! y me acordaba que no eran distintos, y me enteré que a  me pasaba algo, y tendría que averiguarlo pronto.


Conclusión: Así ocurrió, hasta que no pude hacer nada, hasta que no puede adaptarme a esa horrible situación y hasta que no pude hablar con mis extraños amigos. Hasta que no pude entender qué había cambiado y hasta que no pude entender la situación de mis compañeros...

...y en definitiva, así ocurrió. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar no muerde...